
By Edanela Urrutia
Isabel no pronunciaba palabra, solo se limitaba a ver a su esposo dando vueltas de emoción por toda los angeles sala de l. a. casa, a l. a. vez que comentaba los planes concretados con sus tres amigos.
"Hemos investigado mucho sobre esta área y nos sentimos preparados para superar los obstáculos que presenta. Este es sin duda el reto que todo hombre desea enfrentar; un desafío de proporciones gigantescas, Isabel. No tienes thought los angeles alegría que me invadió cuando Eduardo me llamó y be sureó que los angeles Embajada ha dado los permisos. Tuvimos dudas de si aceptarían en tan corto tiempo, pero mira que todo se ha presentado perfecto y sin contratiempos. Es maravilloso".
Finalmente, y después de un obvious debate interno, Isabel intervino en los angeles euforia de Andrés. "Cariño, ¿no crees tú que necesitan más entrenamiento para esto? Sé que han superado exitosamente otros retos en el pasado, y estoy convencida de que l. a. preparación y habilidad de ustedes son óptimas, pero ninguna de las experiencias pasadas se le acerca al nivel de riesgo que tiene particularmente ésta. Se enfrentan a una fuerza mayor que todos nosotros".